El nuevo cuerpo

 


El nuevo cuerpo

Si la vida fuese moda

Si la vida solo fuese moda, Romina sería la anfitriona perfecta. Desde que tenía uso de razón, su vida giraba en torno a todas aquellas prendas, diseños, accesorios, zapatos que se vendían en las mejores tiendas. Realmente su posición económica le permitía ese lujo, comprar y comprar hasta llenar su casa de variedad de modelos, que algunos ni siquiera estrenaba.

Caminaba por la calle mayor observando los escaparates, llevaba más de seis bolsas en la mano, en su mente imaginaba que al día siguiente volvería, pues el tiempo apremiaba para la hora de la peluquería y manicura.

El salón de belleza era espectacular, de dos pisos y con todos los servicios que uno pudiese imaginar. Sabía que allí estaría hasta la hora de la cena, a la que acudiría en una cita concertada con un hombre de renombre, muy solicitado por la mayoría de las mujeres. Ese tipo de personaje que vivía del lujo igual que ella, que nunca se comprometía, simplemente disfrutaba y hacía disfrutar.

Relajada con su baño de color en el pelo, pensaba en lo desagradable que había sido la última dependienta, el que le llevase cinco horas elegir un vestido, no era causa para irritarse de la forma que aquella empleada lo había hecho. Por qué no comiese un día, tampoco pasaba nada. Le irritaba la gente que no entendía su indecisión, al fin y al cabo, ella era la que pagaba.

Romina terminó su baño de color, pasando de viva a muerta, tal y como estaba sentada, así se quedó, como un pajarillo, sin decir nada, sin ningún ruido. No fueron muchos los que acudieron a su funeral, y los que fueron era para ver cómo iba vestida. Lo cierto es que no parecía que estuviese difunta, el maquillaje perfecto, bien peinada y el precio de aquel vestido podría dar alimento a varias familias.

En un momento se vio en un plano distinto, no tenía cuerpo, pero si alma, pensamientos, sentimientos. Un hombre vestido de modo impecable, la recibió y la invitó a pasar a la sala de los cuerpos.

Una estancia infinita abarrotada de cuerpos de todos los tipos, tamaños, edades, con distintos peinados, maquillajes. Para Romina aquello era el paraíso.

El hombre del traje impecable ascendió de plano y otro ocupó su lugar. La mujer llevaba meses intentando elegir un cuerpo. El tiempo terminó y Romina se esfumó. 

El nuevo cuerpo




Comentarios

  1. Lindo capítulo, amiga! Se a vida fosse moda teria sempre a chance de se renovar a cada estação.
    Seria bom, mas...

    Tenha uma feliz semana.

    Beijinhos

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  2. Este es un cuento SOBERBIO... de verdad que está bacano.

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  3. Y seguro que después de muerta se subasta la ropa.

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  4. Buen relato, ella era un objeto mas hasta pareciera que no tuviera alma. Te mando un beso.

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  5. miserable story....
    excellent the way you write its....

    Have a wonderful day

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  6. Un relato de total impacto. Todas las emociones afloran durante la lectura, es extraordinario. Las almas jugando, las almas saltando. Muchos abrazos Mar, te quedó increíble! ❤️❤️❤️❤️

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  7. Me gustaría pensar que cuando morimos nos damos cuenta de todo lo que pudimos hacer mejor pero tu relato sugiere que no, que quizás algunas personas siguen emperradas en lo mismo. Un cuento que invita a la reflexión. Me gustó mucho. Saludos.

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  8. Muy bueno, Ana! Pobre mujer, tanto en la vida como después de la muerte seguía anclada en la superficialidad y culto al cuerpo, normal que se esfumara. Has retratado muy bien este tipo de personas, que desgraciadamente, para ellas y para los demás (ejemplo: la dependienta) existen. Felicidades. Un fuerte abrazo!

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  9. Grande história de uma brilhante inspiração .
    Amei!

    Beijinhos amiga

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  10. Está muy bueno y con un picante de humor negro

    Paz

    Isaac

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  11. ¡Holaaa!

    Muy chulo. La foto me ha encantado también :D

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  12. Passando para reler e desejar uma feliz noite.

    Beijinhos 🌷

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  13. ¡Hola!
    Muy bien planteado el relato.
    Parece que la protagonista olvidó rechazar el culto al cuerpo, y le dio prioridad a la belleza superficial y pasajera. ¡Muy buena reflexión!
    Un saludo

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