El ojo del viento
Nunca supo cuál era el
poder del viento hasta que lo conoció durante una fiesta, tras varias horas de
baile el mundo se convirtió en aire, donde todo giraba a su alrededor. No podía
mirar más allá, pues siempre estaba su mirada, aquellos ojos que penetraban en
su corazón levantando aquel viento fresco que nunca pensó que existiese, ese
aire puro que respiraba cuando le veía, ese que le daba la vida para poder
seguir adelante.
Algunos momentos eran
silenciosos, otros terroríficos y en otros reinaba la paz, eran esos los
instantes que deseaba, cuando el ojo del viento penetraba en su corazón y se
quedaba unas horas en las cuales su respiración era normal, aunque algo agitada
por el amor que sentía, permitiendo que sus constantes se estabilizasen con el
contacto de su mano sobre la suya, era la oportunidad que su cerebro precisaba
para despertar al escuchar su voz.
Él, solo se sentaba a su
lado, le decía cuanto la quería, agarraba su mano y rezaba para que aquella
tortura terminase pronto, quería volver a sentir sus abrazos, sus palabras
cariñosas, sus besos, deseaba darle su fuerza o cambiarse por ella.
Todo sucediera la noche
del baile, se conocieron, bailaron, se enamoraron, todo se manifestaba como en
un cuento, parecía que el tiempo era primordial y tendría que suceder así de
rápido.
Un desmayo en sus brazos
terminó con todo en un segundo, ahora estaba en esa cama, inmóvil, sin saber si
sentía o no sentía, si tenía dolor o paz, si le reconocería.
Ella, vivía una y otra
vez aquel baile, recordaba cada minuto, como se había enamorado, lo deprisa que
iba todo en cuanto a sentimientos, luego la oscuridad, el vacío. No había
dolor, solo tristeza hasta que la puerta de la habitación se abría y entraba el
ojo del viento, su viento, lo sabía por qué solo podía notar el aire fresco que
le producía su presencia, era como el ojo de una aguja, pequeño, pero
suficiente para mantenerla estable durante unas horas, en las cuales sentía ese
amor que en su mundo revivía una y otra vez.
¡Hola!
ResponderEliminarQue historia tan conmovedora y triste a la vez.
Es curioso como la vida nos puede cambiar de la noche a la mañana, y bonito es que a pesar de esos cambios el amor perdure, y no solo eso, que él, siga al pie del cañón reavivando esa llama día tras día y así evitar que no se apague.
Aunque el final no es que sea muy esperanzador, espero que ella pueda despertar y revivir ese baile, pero de verdad.
Besotes
Holaa
ResponderEliminarA pesar de ser un relato muy bonito me apena muchísimo el final. Me encantaría conocer más sobre esta historia y ya sabes, el final feliz. Ver cómo despierta y puede revivir de nuevo todo lo que anhela.
Besotes
Hola guapa
ResponderEliminarAy este relato es de los que te toca el corazón, es muy intenso y está cargado de emociones de las que sacan las lágrimas
Es curioso la fuerza la que puede tener el amor de verdad, como siente esa brisa fresca. Pero que lástima me da la historia en si
Un besazo
Hola wapa! Es un relato cortito pero muy bonito, pero al final es un poco triste y conmovedor.
ResponderEliminarBsss
Es un relato intenso, y me encanta la imagen con la que lo has acompañado, parece metafórico, a veces las relaciones suelen ser así de intensas.
ResponderEliminarHola guapa, me ha parecido un relato muy onirico, la verdad es que me ha gustado la atmosfera que has creado y sobretodo el final, que creo que es donde mas destacan tus escritos! besos
ResponderEliminarEs increíble y sucede tanto eso de que la vida nos puede cambiar en un solo instante! Muy lindo relato. Muchos abrazos, amiga ☺️🤗
ResponderEliminarLa vida golpea sin avisar, pero a pesar de la tristeza también es bella, como ese baile, esa historia de amor que se trunca pero que se cuela en esa personificación del viento. Muy bello, aunque sea también triste. Me ha encantado leerlo. Un fuerte abrazo!
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