Autor sin duende
Eran las cinco de la
mañana, seguía sin dormir, no podía dejar de pensar en aquel sueño de la noche
anterior, la impotencia lo consumía, estaba desconcertado y a la vez
ilusionado. El despertar sobresaltado lo
había alterado, no le importaba, tenía una historia que contar, poder comenzar
su próximo libro, durante los minutos que estuvo despierto sentía que iba a ser
una gran historia, los duendes se postularon a su favor ofreciéndole un relato,
ahora solo tenía que plasmarlo, escenificarlo.
De nuevo el sopor quería
apoderarse de su mente, se durmió creyendo que la suerte le acompañaba, llevaba
muchos años sin poder escribir una línea, mucho tiempo sin ideas, días enteros
leyendo a otros para iluminarse, sin embargo, la inspiración no llegaba.
Esa mañana se levantó
animado, todo estaba detallado, aquella ilusión seguía allí, la ordenaba en su
memoria, descubriendo paso a paso como describir cada momento, las palabras, la
acción hasta llegar a aquel fin tan esperado.
Sentado delante de la
pantalla observaba el teclado sin poder mover los dedos, a pesar de que todo
estaba en su cabeza no era capaz de transportarlo al papel, el relato era
claro, completo, no entendía por qué no quería salir del interior de su
recuerdo.
Durante dos horas estuvo
pendiente de aquel papel en blanco, llegó a dominarlo la ansiedad, la
desesperación, decidió levantarse para preparar un café, el relato continuaba
apoderándose de su mente, cada vez descubría más tema para completar aquella
trama, sacó un papel, un bolígrafo, no obstante, todo lo retenido no quería
manifestarse.
De nuevo la noche, un día
perdido que había sido la causa de su nerviosismo, de su enfado. Quiso dormir
para volver a imaginar, aquel sueño seguía atormentando aquella mente soñadora.
Las cinco de la mañana, miraba la oscuridad de la habitación pensando en que
los duendes le habían dado la idea, tenía que ser capaz de reproducirla, por
más vueltas que daba era incapaz de escribir una sola línea. Las letras se
habían borrado, solo podía soñar con la historia, le parecía muy triste no
poder compartirla, que otros se beneficiasen de sus palabras, guardaría el
libro en su interior por si en alguna ocasión las letras se despertaban.
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ResponderEliminarNice blog
ResponderEliminarvery nice article
ResponderEliminarplease visit my blog
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Me gusta la historia, donde el protagonista lucha contra esas mañanas donde la inspiracion está ausente y tras haber pasado una noche de continuas dudas personales que le marcan.
ResponderEliminarLo cierto es que el relato encaja bien y se hace agradable de leer permitiendo que la historia te atriaga para saber más de lo que sucederá
¡Hola!
ResponderEliminarMe parece que tu historia reproduce muy bien los bloqueos a los que se enfrenta el escritor. La página en blanco suele dar mucho miedo y lo que uno tiene en la cabeza no siempre es fácil plasmarlo en un papel. Digamos que no basta con tener una buena idea como el personaje de esta historia. Los duendes a veces nos acompañan y favorecen el proceso de escritura y en otras ocasiones lo entorpecen porque uno no da con la forma adecuada de expresar lo quiere transmitir. Te felicito por el relato. Un abrazo.
Este relato identifica a muchísimos escritores. Incluso lo podemos trasladar a otras cosas. Cuando me siento a estudiar a veces me pasa lo mismo, me quedo en blanco y no consigo ni leer. Cuando escribo en mi blog también me pasa... Cuando la inspiración, concentración y demás no están viene la ansiedad. Y eso es muy dificil de dominar.
ResponderEliminarMe hizo recordar a cuantas veces he tenido una idea en la cabeza y la frustración de no poderla bajarla al papel... o al teclado. Empezar suele ser difícil, una vez hecho, todo empieza a fluir.
ResponderEliminarSaludos!
Un relato con el que se pueden sentir identificados muchos escritores, de los cuales me incluyo.
ResponderEliminarTambién me he encontrado con esta situación donde parece que la mente está creando la historia perfecta y no puedes esperar a estar delante del ordenador para poder plasmarla.
No obstante, algo ocurre y ese momento se trunca....Me ha gustado el relato, muy bien escrito y muy realista.
Hola,
ResponderEliminarCreo que muchos escritores y artistas en general se sienten identificados. Hubo una vez un profesor de diseño que me dijo "duerme con una libreta en tu mesita de noche". Qué gran consejo... la de veces que me desperté en mitad de la noche y apunté esa idea!
Besazos
Me ha encantado el relato y has logrado que me sienta identificado, bien escrito y logra transmitir, reproduce bien los bloqueos del escritor,a veces no es fácil trasladar lo que tienes en la cabeza al papel, sin duda es un momento desesperante para el escritor. A seguir así
ResponderEliminarMmmm. El bloqueo creativo...La página en blanco y, sin embargo, la cabeza repleta de ideas. Suele pasar más veces de los que una quiere. Levo días sin publicar nada en mi blog. Tambien apenas tengo tiempo. Estoy esperando la inspitación. Un saluo.
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarLa lucha contra el folio en blanco y las musas está muy bien reflejada. La desesperación del escritor por no ser capaz de transmitir lo que buye en su mente es bastante angustioso.
Cómo siempre, un gran escrito.
Besos!!
¡Hola!
ResponderEliminarCreo que todos, en cierto modo podemos sentirnos identificados con el relato de hoy. A veces explosiones de ideas rondan en nuestra mente pero somos incapaces de expresarlas e incluso situarlas en diferentes contextos para darlas a conocer.
Espero de verdad que el escritor halle la fórmula para poder expresarse, porque no imagino algo más frustrante.
Besotes
Reflejas muy bien la sensación de no poder exteriorizar, en palabras, el argumento de un libro y, sin irnos tan lejos, incluso, cuando en mi caso he de escribir un comentario de algún libro que he leído, a lo mejor tienes las ideas, pero no sabes cómo exteriorizarlas.
ResponderEliminarPara un escritor, debe de ser muchísimo peor esperar a las musas que saquen todo cuanto tiene que decir desde su imaginación al papel.
Estoy segura que muchas personas nos sentimos identificados totalmente, es increíble cuando nos bloqueamos y a veces cometemos el error de no desconectar para volver a crear con la mente más relajada. Me fascina como lo transmites, el café, la falta de sueño, el paso de las horas. Muy bueno!
ResponderEliminarCómo cuesta a veces que llegue la inspiración...! Me encanta lo bien que describes esos momentos. Es de admirar lo bien que enlazas y lo que uno logra empatizar con personajes gracias a las palabras.
ResponderEliminarqué buen relato me recuerda a esos días que tienes un sueño que deseas compartir siempre creo que a todos nos ha pasado y estás dispuesto a escribirlo no importa ya sea como una nota como el autor en este caso pues quería hacer un libro el relato perfecto porque tenía las herramientas para hacerlo porque tenía los conocimientos pero cuando nosotros solamente queremos tomar una idea una la nota o o hacer algo al respecto se siente frustrante porque sabes que es algo que puede servir o algo que puede ayudar a otros pero sin embargo la idea no quiere salir y así muchas cosas que en el transcurso de los años te das cuenta que que no todo lo puedes compartir No todo lo puedes mostrar no todo lo puedes escribir simplemente te quedas con la idea y esa sensación porque tal vez es un regalo para ti y bueno me ha pasado me ha pasado no soy escritora de libros pero me ha pasado a veces lo que hago para el lugar de escribir hago notas hago notas de audio para poder esté recordar ese momento me gustó mucho, me gustó mucho tu relato Gracias por compartirlo saludos.
ResponderEliminarOhh que historia mas conmovedora para mi, a todos creo nos pasa que a veces no sabemos como ponerle palabras a esas ideas que tenemos en la cabeza.
ResponderEliminarEn cambio tu siempre sabes como darle palabras hermosas a pensamientos o situaciones como estas.
Gracias! Me sentí identificada!
Creo que todo el mundo que ha escrito en algún determinado momento de su vida ha sentido esa sensación que tan bien describes. A veces tenemos tantas cosas que decir o escribir que cuando tenemos que hacerlo nos quedamos bloqueadas.
ResponderEliminarExcelente relato, la mayoría de las cosas que nos cuenta este relato es totalmente verídico, los momentos de ausencia... pero con ideas tremendas que no sabes cómo plasmar en papel. Yo creo que la mayoría por no decir todos los escritores han vivido esos momentos lo comparto! Me encantó. Saludos
ResponderEliminarMe vi reflejada cuando tengo que hacer el diseño de alguna casa, tienda, etc..y pun me quedo en blanco frente al papel o la computadora
ResponderEliminarPeor cuando una noche antes se me vinieron en sueños varias ideas y al final ninguna salio del sueño...
Me frusto un poquito...
Por la temática de mi blog no he llegado a sentir ese bloqueo del protagonista del relato, al contrario, demasiadas ideas y poco tiempo para plasmarlas. Pero quienes estén en el mundo literario con sus plazos y demás necesitan a los duendes de su lado...bss!
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